La organización World Wild Fund (WWF) advirtió hoy del riesgo de fracaso de la cumbre medioambiental de Río+20, que comienza a celebrarse dentro de dos semanas, por la falta de compromiso y de liderazgo por parte de los gobernantes.
"En estos momentos, estamos muy lejos de donde deberíamos en estas negociaciones", manifestó en un comunicado el director general de WWF, Jim Leape, quien consideró no obstante que "los líderes mundiales todavía tienen una oportunidad única en Río para poner al mundo en la senda del desarrollo sostenible".
Para ello, expuso Leape, los dirigentes políticos tienen que "dar un paso adelante de manera drástica": "Tal y como están las cosas, afrontamos dos escenarios probables: un acuerdo débil e insignificante o el fracaso absoluto", puntualizó.
WWF expresó su preocupación por lo ocurrido este fin de semana, cuando las conversaciones entre los países se dividieron en 19 diálogos independientes, cada uno de ellos con desacuerdos internos sobre la manera y el proceso a seguir de cara a Río+20.
"Los países todavía están demasiado atrincherados y demasiado alejados los unos de los otros como para facilitar un borrador de acuerdo significativo que pueda ser aprobado por los 120 jefes de Estado" en la cumbre de Río, afirmó la organización de defensa medioambiental.
Para WWF, el último texto sobre el que se trabaja debilita el contenido de los borradores anteriores, especialmente en el terreno de valoración de la riqueza natural y de la protección marina y energética.
Leape instó a los gobernantes a "evitar las palabras engañosas", porque "no ayudan a sus pueblos o al planeta 'tomando nota', 'reconociendo' o 'haciendo hincapié' en los problemas ecológicos".
"Tenemos que ver un compromiso con fechas concretas y palabras de acción como 'haremos', 'debemos' y 'ofreceremos resultados'", dijo.
El último informe de WWF advirtió de que sería necesario medio planeta más para atender las actuales necesidades energéticas de sus 6.000 millones de habitantes.
Esta organización reconoce que las conversaciones de Río+20 serán difíciles, pero considera que, al menos, los mandatarios deben propiciar "un mandato político claro que garantice la seguridad alimentaria, hídrica y energética a todos para 2030".
Esto significa, según WWF, integrar el valor de la naturaleza en los estándares de contabilidad nacionales y empresariales, eliminar los subsidios que dañan el medio ambiente, asumir los Objetivos de Desarrollo Sostenible y fortalecer la protección de los océanos.
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