“El proyecto cuesta un millón de dólares, de los cuales el 60 por ciento está financiado por Swiss Contact y el resto por el gobierno municipal”, dijo la directora de Swiss Contact en Cochabamba, Carola Ortuño, y explicó que esta nueva fábrica “tendría que ser administrada por la Empresa Municipal de Saneamiento Ambiental (EMSA), porque se trata de desechos orgánicos, que se van a valorizar al transformarse en compostaje y biogás”.
Según la responsable de la entidad cooperante, para que este proyecto funcione habrá un esquema especial de recolección de grandes productores de residuos sólidos por lo que “estamos trabajando con un plan especial de gestión interna, dentro de los mercados, para separar la basura y entregarla al sistema de recolección externa, que sería realizada por EMSA”. Explicó además que “se necesitará un fuerte trabajo de educación con las caseritas y con la gente que tiene el oficio del comercio”.
Estas campañas se iniciarán con los dirigentes del sector. “Vamos a impulsar este proyecto primero a nivel interno y, una vez que realmente se consiga calidad en la separación, recién empezaremos a recoger estos residuos”, dijo Ortuño.
La ambientalista informó que el primer centro de abasto con el que se empezará a trabajar será el mercado campesino de frutas, que se encuentra en la parte sur de la laguna Alalay, en la zona de Siglo XX.
Por otro lado, la responsable de la entidad extranjera informó que “todo el proyecto ya está elaborado y lo único que falta hacer es definir el sitio, aunque ya tenemos dos sitios elegidos en el Distrito 9 (zona de Albarrancho)”.
Aclaró que esta fábrica no es ni un botadero ni un relleno sanitario, “es un centro productivo al que se llevará la materia orgánica para hacer compost y biogás”. La zona fue elegida por su cercanía con la planta de tratamiento y por las regiones desérticas existentes allí.
Limpieza y obras
La recolección de los desechos orgánicos de los mercados de Cochabamba tendrá dos beneficios para las vendedoras que separen sus desperdicios y los entreguen clasificados a los funcionarios de EMSA: el primero es la limpieza e higiene de sus puestos de trabajo y el segundo la construcción de obras especiales efectuada por la Alcaldía de Cercado en la zona en la que funcionan sus puestos.
“El abono que se fabricará en esta nueva planta productora servirá para mejorar las áreas verdes que existen dentro de los mercados cochabambinos, porque las vendedoras quieren mejoras y también higiene”, dijo Carola Ortuño.
La responsable de Swiss Contact aclaró que “la generación de la materia orgánica representa aproximadamente el 60 ó 65 por ciento del conjunto de la basura. Lo que significa que es la basura que más se genera en esta ciudad, por eso la estrategia que aplicaremos es valorizarla a través del compostaje”.
Desechos
Los mercados de la ciudad de Cochabamba probablemente son las zonas más sucias de la ciudad, pues ni siquiera existen botes en los que compradores y comerciantes puedan depositar sus desperdicios, razón por la cual sus calles siempre están sucias y llenas de basura —sobre todo orgánica.
Actualmente, la limpieza de esa zona está a cargo de las trabajadoras de EMSA, que en su mayoría son mujeres y se dedican a barrer las calles, especialmente de La Cancha, y a recoger los desperdicios en las madrugadas, después de las 00:00, arriesgándose a ser mordidas por alguno de los miles de perros que viven en la zona o a ser atacadas por algún antisocial.
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