Es posible un capitalismo respetuoso con la protección del planeta y de sus recursos naturales? ¿Podemos hablar de una economía verde? Tan ambiciosa meta es el debate de fondo que lanza la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20), evento que se celebrará en Río de Janeiro entre los días 20 y 22 de junio.
La pregunta se formula mientras se constata que el actual modelo de consumo se ha convertido en una amenaza directa para el 30% de las especies del planeta, según alerta un informe de la revista Nature, citado por el diario español La Vanguardia.
La concentración de los gases invernadero roza las 400 partes por millón, lo que hace casi imposible frenar el indeseado aumento de temperaturas de dos grados. Y el fin del petróleo barato, sobre el que se centra el modelo energético, parece ciertamente cercano.
“El capitalismo verde no sólo no es necesario, sino que es una idea oportuna y posible. Sólo hace falta que se den las condiciones del cambio; aunque echo en falta un verdadero propósito en este sentido”, señala Domingo Jiménez Beltrán, ex director de la Agencia Europea de Medio Ambiente.
Obstáculo ecológico
Jiménez Beltrán destaca que, frente al optimismo que precedió la Cumbre de Río de Janeiro de hace 20 años, ahora, en la actual situación de crisis, vuelve a resurgir con fuerza la idea de que la protección del medio ambiente es un obstáculo para el desarrollo económico.
“La adecuada gestión de nuestros activos naturales no supone un freno al desarrollo económico y al bienestar social; no me imagino un desarrollo que no sea más verde”, opina, en cambio, Federico Ramos, secretario de Estado de Medio Ambiente.
Los expertos señalan que para asentar un capitalismo verde sería necesario medir el progreso con otro tipo de indicadores, porque simplemente no se puede medir la riqueza como ahora.
Un nuevo modelo
Propuesta Una “economía verde” significa producir lo necesario. Pero el mercado no va en esa línea; abusa de la extracción de recursos y genera un sobreconsumo.
Realidad Se requiere consumir menos energía, tender a un modelo energético descentralizado y favorecer las fuentes de energía renovables, como la eólica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario