“Los cambios climáticos que se registran a nivel mundial provocan serios daños a la naturaleza y el medio ambiente, por eso las manifestaciones biológicas andinas sufren un desequilibrio y alteran los indicadores naturales en la región andina”, fue el pronunciamiento del Encuentro Regional Andino de Cambio Climáticos, al que acudió la Mancomunidad de Municipios Aymaras sin Fronteras. La cita empezó ayer en el Municipio de Tiquipaya de Cochabamba, y hoy se pretende entregar las conclusiones del encuentro a las 17 mesas de trabajo de la “Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra”.
La institución que comprende 6 municipios de Oruro y 2 municipios de La Paz, participó conjuntamente en la reunión con alcaldes, concejales y productores de ganado camélido de Bolivia, Chile y Perú respectivamente, en el debate climatológico.
El gerente de la Mancomunidad, Alejandro Choque, aseveró que el Encuentro Regional Andino, permitió conocer más detalles sobre los cambios climáticos que afectan a las familias del área rural principalmente.
“Una de las exposiciones que nos llamó la atención es la situación de los hermanos del Parque Nacional Sajama, en la que hemos podido constatar que la producción de forraje y el agua para el consumo de las llamas rebajó considerablemente, causando efectos en la economía de las familias del área rural”, dijo.
El encuentro contó con la participación de más de 200 personas que se ubicaron en el coliseo de la Universidad del Valle en la que se destacó la visión de los aymaras con relación a los cambios climáticos que se registran a nivel mundial.
El ex mallku de Curahuara marka, David Crispín explicó que los indicadores naturales sufren desequilibrios y están totalmente alterados en relación hace 20 años, “porque antes se tenía una serie de datos para establecer si existirá buena cosecha, pero ahora...”.
YARETA
Otra muestra del efecto cambio climático es el comportamiento del “llanto de la yareta (planta andina)” que según la creencia de los aymaras predice el tiempo. Cuando “llora harto” es una señal que será un buen año, pero si no llora mucho se tendrá una producción relativamente buena; y en el caso extremo si no llora nada, habrá viento, poca lluvia por consiguiente poca producción agrícola y de forrajes.
Crispín ex autoridad originaria afirmó que “más allá de los actos rituales, el mundo andino está en relación entre el hombre y la naturaleza, no puede existir una disociación”.
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