De acuerdo a la explicación brindada por el director del Programa de Gestión Sostenible de los Recursos Naturales de la Cuenca del Lago Poopó, dependiente de la Gobernación, Eduardo Ortiz, el presupuesto dispuesto para cinco años que ascendía a 14 millones de euros, no abasteció para revitalizar el lago Poopó.
Aseveró que el daño ambiental que provocó la sedimentación del Poopó se generó hace muchos años debido a la actividad minera y sostuvo que es un problema histórico que no se pudo resolver con un presupuesto limitado y tiempo limitado que tenía el programa.
No obstante, señaló que se inició algunas actividades de revitalización del lago Poopó en la cuenca alta y media, pero no se atendió el problema estructural, porque para ello se requería mayor presupuesto.
Ahora el lago Poopó está seco, se extinguió el ecosistema y cualquier indicio de vida acuática, según denuncia de los comunarios, autoridades originarias y la constatación a través de una investigación periodística que realizó LA PATRIA.
El lago está convertido en un extenso terreno árido. En buena parte de éste territorio hay arcilla y salitre.
COOPERACIÓN EXTRANJERA
Ortiz indicó que en el marco del convenio de financiamiento del Programa Cuenca Poopó que se suscribió en abril del 2010 entre la Unión Europea y Bolivia, se debía abordar diferentes problemáticas de los municipios que son parte de la cuenca, por ejemplo el tema de reducción de la pobreza, generar fuentes de ingreso económico, disminuir la contaminación, entre otros.
Los municipios en los que se intervino son: Huanuni, Poopó, Pazña, Antequera y El Choro.
Mencionó que bajo el convenio de financiamiento se ejecutaron acciones y se tuvo una intervención positiva en el sentido que se atendió las demandas de las comunidades, que principalmente requerían agua para consumo humano y para el ganado.
No obstante, señaló que no se pudo enfocar en la revitalización del lago Poopó, porque para ello se requería mayor presupuesto y acciones concretas, aunque el nombre específico de esta dependencia es Programa Cuenca Poopó.
Explicó que se elaboró el plan director de la cuenca Poopó, a través del cual se plantea acciones concretas que resguarden el lago, por ejemplo, controlar que el caudal del agua que ingresa de la cuenca alta del Titicaca entre en mayor cantidad hacia el río Desaguadero que alimenta al Poopó.
Además tener una información constante de las precipitaciones y medición de caudales, temperaturas, estación meteorológica que estén a cargo del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), esto permitirá tener un conocimiento real de las condiciones climáticas para asumir las acciones correspondientes.
Entre otros trabajos, sostuvo que para el plan director se estima una inversión de 900 millones de bolivianos para los primeros 5 años, pues las necesidades para resolver requieren de bastante inversión y tiempo.
Aseveró que el lago siempre fue vulnerable por sus condiciones climáticas, además tiene un ciclo que en promedio cada 100, 50 o 25 años se seca, no obstante, señaló que ahora es difícil predecir qué sucederá por los efectos del cambio climático.
Agregó que a esto se suma la situación crítica del lago que recibe dos millones de kilogramos de sedimento en promedio y un porcentaje alto de residuos sólidos que colmata el lago Poopó y provocó que disminuya el agua.
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