Expertos señalan que la causa principal de la drástica disminución del caudal del lago Poopó y la consecuente extinción de la pesca para las comunidades de debe principalmente al mal manejo de la cuenca que, en gran parte, tiene que ver con el desvío de agua del río Desaguadero, principal vertiente que alimenta a este lago.
Desde 2005, se conocen alertas y advertencias de que un día el lago Poopó desaparecería por el mal manejo de la cuenca.
"Las dos terceras partes de entrada de agua al lago Poopó tiene que ver con el río Desaguadero. La causa principal de que el lago se esté secando es que ha disminuido el aporte de este río al lago Poopó", explica Jorge Molina, investigador Instituto de Hidrología e Hidráulica de la Universidad Mayor de San Andrés
Molina indica que los principales usuarios del agua del río Desaguadero son los sistemas de riego. Cada vez existe una mayor cantidad de sistemas de riego, en La Paz y Oruro que extraen agua y cada vez en mayor cantidad.
"Lamentablemente no hay gestión en la cuenca del río Desaguadero. Se otorgan los permisos sin ton ni son. Los gobiernos regionales no sólo han otorgado permisos, sino también han financiado nuevos proyectos", agrega el investigador.
Además, desde el año 2009, autoridades bolivianas, entre ellas el canciller David Choquehuanca, denunciaron el desvío del río Mauri y la construcción de trasvases que impiden que el caudal llegue al lago Poopó. Hay que tomar en cuenta que el Mauri es el principal afluente que llevaba agua al lago.
"Hay muchos desvíos que se han hecho en Perú. También en la parte de Bolivia, hay muchos regantes que han ido utilizando el agua del río para las actividades agrícolas. Más del 90 por ciento de aporte al lago Poopó proviene del río Desaguadero", dice por su parte el director de CEPA, Limbert Sánchez.
Asimismo, los expertos indican que coorporaciones mineras que trabajan en inmediaciones de la cuenca han desviado mucha cantidad de agua para realizar sus operaciones.
"Las empresas mineras han desviado los cauces de los ríos para beneficio propio de estas empresas, porque las actividades mineras sin agua no funcionan", agrega el director del CEPA.
CAMBIO CLIMÁTICO
Sánchez no descarta también el cambio climático, que, con el incremento de las temperaturas y la disminución de precipitaciones, repercute directamente en una menor cantidad de agua que llega al lago.
"El promedio de la temperatura en Oruro hace unos años era de 17 grados centígrados, ahora es de 18 a 20 grados centígrados, eso significa que hay más evaporación del agua y como el lago Poopó es una cuenca endorreica que no tiene salida, es un espejo que va evaporandose más rápido", manifiesta Sánchez.
EL FUTURO DEL LAGO
“Ya no creo que el lago vuelva a recuperarse", manifiesta Simiano Valerio, mallku de las comunidades urus.
Muchos comunarios urus no ven probable que el Poopó vuelva a recuperar su caudal.
Por su parte, el investigador Jorge Molina indica que se tratan de periodos naturales y que ya se suscitaron ocasiones en las que el lago se secó por la poca profundidad y por años sin lluvia.
"Lo que va a pasar por la intervención del hombre es que el lago se seque en periodos más cortos que antes", dice Molina.
Una reciente investigación de la Universidad Técnica de Oruro advierte que el lecho podría convertirse en salar a causa de las elevadas concentraciones de arsenio, plomo, cadmio y zinc, lo que acelera la desaparición del recurso hídrico, sumada a la contaminación.
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