Disminuye la exportación de maderas bolivianas. De enero a agosto de 2011, las ventas de productos maderables (láminas, puertas, madera aserrada, pisos y muebles) han caído en más de $us 10 millones, principalmente a los mercados de Estados Unidos y China, producto de los cambios en la normativa forestal, la inseguridad jurídica y la lentitud en la entrega de los Certificados Forestales de Origen (CFO), así lo desvela un estudio de la Cámara Forestal de Bolivia (CFB).
Lo inexplicable de la situación es que Bolivia se ubica en el segundo grupo de los países con mayor deforestación en el mundo, pues pierde entre 250.000 hectáreas (ha) y 500.000 ha de bosques cada año, según un reporte de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Los datos fueron divulgados por el presidente de la CFB, Pablo Antelo, y el gerente de esa entidad, Jorge Ávila.
Durante el mes de junio de este año, el volumen de exportación de las maderas bolivianas ya se había reducido un 21,2% comparado al mismo mes de 2010 y hasta agosto continúa en ese orden.
Tal situación llama la atención del sector, pues implica la pérdida de mercados, la disminución de ingresos de divisas para el país y un daño socioeconómico para las más de 90.000 familias que trabajan directamente en la actividad, especialmente, en lo que hace al sector exportador maderero boliviano, indicó Antelo.
Los forestales aseguran que la modificación en los trámites de los CFO del sistema manual al digital y que se exige a los operadores de bosque, significó la paralización de la actividad, lo que a su vez impactó en los volúmenes de oferta en las barracas y carpinterías y además afecta las exportaciones.
Si bien el sector considera que entre septiembre y diciembre habrá un aumento de la oferta maderable, esta no alcanzará a cubrir las necesidades. Alertan que si se registra un nuevo cambio legal como la denominada Ley de Bosques, esto puede derivar en otra paralización.
Por su lado, un informe de la FAO que recoge información recopilada y analizada de 233 países y áreas en el mundo, señala que la tasa de deforestación aún es alarmante. Brasil y Australia son los principales países que tienen una deforestación que supera las 500.000 ha por año. Bolivia y Venezuela, aparecen en el continente en el segundo grupo con un rango de deforestación entre 250.000 hasta 500.000 ha.
La Autoridad de Bosques y Tierra (ABT) se limitó a señalar que mañana hará operativos en las áreas donde se registran focos de calor y las zonas deforestadas.
Se erosiona el futuro del país
Lincoln Quevedo | Dir. del Centro de Investigación y Manejo de Recursos Naturales
Nuestra población es relativamente baja, lo cual hace que la tasa de deforestación per cápita sea elevada. Esto nos coloca en una situación desafortunada de estar en el segundo grupo de los países con mayor índice de deforestación. Nosotros no tenemos tecnología, grandes industrias ni somos grandes exportadores de manufacturas y nos basamos en nuestros recursos naturales, entonces deberíamos preocuparnos por la deforestación que son la fuente de nuestro propio desarrollo. De ahí que el Gobierno y las instituciones deberíamos prestar especial atención al asunto. Es hora de hacer un pacto entre todos para disminuir la deforestación que tenemos en el país. En este momento las políticas gubernamentales son contradictorias.
Por otro lado, tenemos el boom de la agricultura mecanizada, la migratoria, etc.
Un ejemplo claro de lo que ocurre en el país es la reserva Choré. En síntesis, se erosiona el futuro del país y de los bolivianos.
En cuanto a la caída de la exportación de madera, se ha dado por las políticas fuertes de la ABT para controlar la tala ilegal. Se han establecido medidas administrativas rigurosas.
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