La laguna Alalay ha sufrido un grave daño ambiental que afecta a todo su ecosistema y cuyo impacto negativo ya ha incidido en la muerte de peces y aves acuáticas según explicó a este medio el responsable de la laguna Alalay, Alan Lisberger.
Si bien el informe oficial sobre los niveles de contaminación del agua de la laguna -tras el desfogue de cerca de 900 litros de aguas servidas de alcantarilla- lo debe realizar el Centro de Aguas y Saneamiento Ambiental (CASA) de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) “ya se viven niveles de contaminación”, reconoció el responsable de la Secretaría de la Madre Tierra de la Alcaldía de Cercado, Germán Parrilla.
Los resultados van a determinar el grado de contaminación a través de parámetros como el nivel del oxígeno, el de PH, la turbiedad y la presencia de metales pesados, entre otros criterios establecidos según la norma, explicó Alan Lisberger.
Lisberger y Parrilla coincidieron en señalar, por separado, que las medidas de mitigación serán planteadas sobre la base de los resultados del CASA.
Parrilla aseguró que se realiza el análisis del trabajo para solucionar el problema que se debe encarar a futuro, consiste primero en recuperar un año de gestión venido a la nada por el ingreso de agua de cloaca a la laguna.
Según Parrilla, debe asumirse un nuevo proceso de recuperación con un trabajo biológico con especies vegetales que absorban la contaminación o por un sistema de mayor tecnología.
Las decisiones técnicas serán definidas mañana en la reunión de las instituciones integrantes del Comité de Recuperación de la Laguna Alalay, según informó Parrilla, quien lamentó el accidente que habría dejado en nada muchos avances en el control de afluentes a la laguna como el del río Rocha.
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