Tras la hilera polvorosa de protestas que a su andar levanta la VIII Gran Marcha de los Pueblos Indígenas del Oriente de Bolivia, ahora en territorio andino, la comunidad internacional contempla con atención el avance del modelo desarrollista del Gobierno boliviano, que desde mayo viene analizando, además, a pedido de ejecutivos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), la ampliación de 56 a 98 las áreas de interés para la explotación de recursos naturales en áreas y parques protegidos en los nueve departamentos del país. Decisión que el viceministro de Exploración y Explotación de Hidrocarburos, Eduardo Alarcón, explicó no se ha tomado todavía "considerando que actualmente existen problemas como es el caso del Aguaragüe y del Tipnis".
Pablo Solón, exembajador boliviano en las Naciones Unidas, célebre por su participación en la última Cumbre de Cambio Climático en Cancún, enciende la alarma cuando recuerda que "debe haber coherencia entre lo que decimos y hacemos".
Lo que decimos. El 20 de octubre de 2006, el Estado boliviano le daba un mensaje al mundo al aprobar el proyecto de ley 1107/07, con que el Senado constituía en Ley de la República los 46 artículos de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas. De esta forma, el Poder Legislativo se convirtió en el primero del mundo en reconocer los derechos indígenas.
"Han habido avances, no lo podemos negar. El problema es que no se han traducido en gestión", opina Alaín Muñoz, experto en temas ambientales. Como ejemplo resalta que desde hace dos años se viene trabajando en una nueva Ley Forestal. Son alrededor de 7 propuestas las que se manejan, pero ninguna logra el consenso. "Mientras lo que ya se había logrado avanzar en la preservación de bosques se debilita cada vez más", dice. La Ley del Agua, es otra norma que se espera para la administración del recurso en tiempos de sequías.
Lo que hacemos. Cuatro años después del histórico "mensaje al mundo", en la misma fecha se promulgó el decreto 676, en el cual se ampliaba las áreas reservadas de interés hidrocarburífero, de 33 a 56, para que YPFB, pueda explorar, explotar o adjudicar.
"Un decreto anticonstitucional, y que desconoce a los convenios medio ambientales suscritos por este mismo Gobierno", lamenta Miguel Ángel Crespo, director de Probioma.
Datos del Centro de Estudios Para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), revelan que en 2006, los hidrocarburos eran la principal fuente de ingresos económicos del país, seguido por la minería. "Si desde entonces algo ha cambiado es que hoy día somos más dependientes de las exportaciones de hidrocarburos y minería, que constituyen el 80% de las exportaciones", señala un informe. Como ejemplo, en 2008 el 40% de crecimiento económico del país se debió a la minería.
Preferencias. El experto en materia energética Gustavo Rodríguez advierte que "a la inversión extranjera nunca le ha interesado abastecer el mercado interno, y hoy no hay condiciones que hagan cambiar esa disposición". Con esto resume datos presentados por la estatal Gas Trans Boliviano (GTB), publicados en septiembre de 2011, donde informa que Bolivia exporta al Brasil un promedio de 31 millones de metros cúbicos diarios (MMmcd) de gas; es decir, el 68,8% de la producción que bordea los 45 MMmcd. Otros 5 MMmcd son exportados a Argentina, mientras un 9 MMmcd se quedan en el mercado interno.
Diferentes visiones. Sobre este tema vuelve Alaín Muñoz para explicar que un mismo Estado cobija tres paradigmas distintos. Un pensamiento indígena, que concibe al ser humano como parte de la naturaleza, albergando una concepción mágico-religiosa. Desarrollista, que se traduce en algunas medidas que parecen concebir el desarrollo económico como el mecanismo más efectivo para la eliminar la pobreza. El ambientalista, el cual "lleva un pie en la veneración a la naturaleza", y el otro en el desarrollo a través de la inversión en investigación.
48% Exportaciones Representa en 2011 la venta de hidrocarburos, tanto a Brasil como Argentina.
58% Importaciones de carburantes creció en comparación a 2010. En seis años, el gasto ascendió a $us 368 millones.
Inversión en exploración crece en 2011
El presupuesto de YPFB, contempla invertir $us 388 millones en exploración de hidrocarburos. En 5 años se invirtió un promedio de $us 58,67 millones.
La reserva reconocida por 'neoliberales'
En 1990, el gobierno de Jaime Paz Zamora reconoció el tipnis por una extensión de 1,2 millones de hectáreas. El 2009, el gobierno lo redujo a 1 millón de hectáreas.
¿Y el turismo dónde queda?
El Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Madidi, esa joya del ecosistema mundial, se encuentra al noroeste de La Paz. Colinda con otras áreas protegidas como el Área Natural de Manejo Integrado Apolobamba, la Reserva de la Biosfera y Tierra Comunitaria de Origen Pilón Lajas y, al oeste, con la Reserva Nacional Tambopata y el Parque Nacional Bahuaja Sonene del Perú. Dentro de cualquier paquete turístico hacia nuestro país se lo nombre como un destino turístico inevitable. Sin embargo, con la aprobación del decreto 0676, alrededor de 690.000 hectáreas quedan destinadas a la exploración hidrocarburífera. Generando la preocupación de ambientalistas sobre si perjudicará o no su ecosistema.
POTENCIAL ECOLÓGICO. Aunque el territorio boliviano es el 0,2% de la extensión mundial. Su superficie de bosques representa el 3,5% de los bosques del mundo. Asimismo, ocupa un lugar entre los 8 países con la mayor riqueza en cuanto a biodiversidad del planeta.
MECANISMOS
Áreas protegidas pueden explorarse
Existen los mecanismos constitucionales para determinar si un proyecto hidrocarburífero es procedente o no.
Procedimientos. Desde fichas ambientales, evaluación de impacto y la presentación de planes de inversión que permitan prever las incidencias.
Lo Constitucional. El decreto 0676 cita preceptos de la Constitución Política del Estado (CPE)para validar la intervención del Estado en áreas protegidas y territorios indígenas. En el artículo 356, señala “las actividades de exploración, explotación, refinación, industrialización, transporte y comercialización de los recursos naturales no renovables tendrán el carácter de necesidad estatal y utilidad pública".
MIRADA AL EXTERIOR
Experiencias de ecologismo rentable
El Parque Nacional Yasuní es el área protegida más grande del Ecuador continental. Cuenta con 982.000 hectáreas de Bosque Húmedo Tropical. Por su gran diversidad fue declarado por la Unesco como Reserva de la Biosfera en 1989. Sin embargo, en 2007 atravesó un momento de incertidumbre cuando se encontraron reservas probadas en hidrocarburos, equivalentes a 108.000 barriles diarios de crudo, durante un período de tiempo estimado entre 10 a 15 años.
En previsión al impacto medioambiental el Gobierno de Rafael Correa, aprobó la alternativa de mantener las reservas en tierra a cambio de una compensación internacional equivalente de menos de la mitad de las utilidades que recibiría el Estado en caso de explotación. La respuesta desde la ONU fue favorable, y se están gestionando los fondos.
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