Al menos tres municipios de la región amazónica del país quedaron aislados debido al desborde del río Beni que anegó las principales vías de acceso a esas localidades. Entretanto cientos de vehículos permanecen varados en carreteras troncales de la zona.
Los municipios de Cobija, en Pando, Riberalta y Guayaramerín en Beni, son las poblaciones que se quedaron incomunicadas con el resto del país, según el reporte de radio Riberalta de la red Onda Local.
"Hay tres tramos inundados en la carretera Puerto Yata - Santa Rosa, a 320 kilómetros de Riberalta. Allí, una fila larga de camiones aguarda la habilitación de un paso provisional, que por el momento la Administradora Boliviana de Carretera descartó, debido a la magnitud del anegamiento; más de un metro sobre la plataforma", añadió el informe.
Los pasajeros han sido evacuados, sin embargo, los conductores y sus ayudantes permanecen en el sector, en medio de las aguas desbordadas donde abundan víboras y otras alimañas.
También, la carretera hacia Cobija (Pando), entre las localidades de Peña Amarilla (Beni) y Copacabana (Pando), se encuentra inundada en varios tramos. En el lado pandino, la inundación llegó a medir hasta un metro y medio, afectando a una tranca de cobro de peaje, a una unidad educativa y a un centro de salud cercanos.
Una comisión de la subgobernación de la provincia Vaca Diez y de la Alcaldía riberalteña llevó alimentos y medicamentos a las comunidades afectadas. Entre tanto, Guayaramerín se declaró, mediante ordenanza municipal, en alerta naranja por la crecida del río Mamoré que rodea al municipio.
"Creemos que en abril vamos a recibir el golpe de agua y estamos reactivando el Centro de Operaciones de Emergencia para coordinar con el Gobierno nacional, departamental y a la cooperación la atención a posibles desastres naturales", dijo la concejala, Rosa Chávez.
Vuelo solidario
Mientras, una treintena de personas que viajaban a Riberalta y Guayaramerín se encuentran varadas hace cinco días en Rurrenabaque, que también fue afectado por la inundación, piden habilitar un vuelo solidario para llegar a su destino.
"Queremos pagar por lo menos la mitad del costo de pasaje, estamos cuatro días varados, es muy lejos nuestro destino", dijo uno de los pobladores albergados en el municipio.
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