El Estado estaría incumpliendo una serie de normas que están vigentes y que llaman a salvaguardar el lago Poopó, que hoy se ha secado y no existen acciones efectivas que reparen ese daño ambiental.
El mallku quta de los Urus, Simiano Valero, sostuvo que las autoridades no están realizando ninguna acción que rescate la vida que existía en el lago Poopó.
Pese a existir la ley nacional 2097 del 8 de junio de 2000, que declaró al lago Poopó como patrimonio nacional y reserva ecológica de Bolivia, y dispone que el Poder Ejecutivo, priorice recursos del Tesoro General de la Nación, además de buscar cooperación económica internacional para la conservación y rehabilitación del lago Poopó.
Si bien en Oruro la Gobernación contó con 14 millones de euros para ese fin, Valero aseguró que como comunidades que vivían de la pesca, no han recibido ningún proyecto ni apoyo alguno de ese programa.
Por ello pidió que se haga una investigación de cómo se invirtieron esos recursos, que tal vez llegaron a lugares que no tienen relación con el lago Poopó, que es a los que se debía ayudar.
También está la Ley Departamental 104 del 17 de diciembre de 2015, que declara desastre departamental del lago Poopó, por los daños climatológicos, meteorológicos, antropogénicos y tecnológicos que tienen o contribuyeron a la desaparición del lago y con ello la fauna silvestre y acuática, y la flora, derivando en la inseguridad alimentaria y económica de los habitantes del lugar.
Esta ley dispone además plantear la formulación de políticas, proyectos, programas y acciones para la restauración, preservación y conservación, y recuperación de los sectores de la población por el desastre.
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