Los focos de calor aumentaron en 2015 respecto a 2014 debido a que la Autoridad de Bosques y Tierra (ABT) otorgó más derechos de uso para desmonte, quemas de pastizales o limpieza de barbechos. En 2014 se registraron 41.930 focos de calor y en la pasada gestión 51.117, casi 10 mil más.
El objetivo -informó el responsable de la unidad de monitoreo de información geoespacial de la ABT, Marco Antonio Condarco- es garantizar la seguridad alimentaria en el país.
"Generalmente los derechos de uso de suelo se otorgan para ganadería y agricultura, principalmente en la Chiquitania (Santa Cruz), en los municipios de San Ramón y Yacuma (Beni), que son los que registran mayor número de focos de calor legales", indicó.
El informe de la ABT indica que los municipios que reflejaron mayor número de focos de calor fueron San Ignacio de Velasco, Pailón, Exaltación y San José de Chiquitos.
La autoridad aclaró que los focos de calor indican que hay una superficie anómala de temperatura en relación a superficies colindantes y es un referente para saber dónde puede haber un incendio, pero no siempre coincide.
Sin embargo sostuvo que se registraron incendios ilegales en Bajo Paragua y dentro de las reservas de Guarayos, "donde viven comunidades que realizan chaqueos pequeños con fines de subsistencia pero hace que se detecten como foco de calor".
Condarco reconoció que las quemas dentro de áreas protegidas, tierras de producción forestal y reservas forestales -que llegan al 38% del total- generan un impacto grande en la biodiversidad. "No podemos decir que no ha habido (incendios forestales) pero no han suscitado eventos de magnitud y no se ha comprometido tanto la biodiversidad y la riqueza de fauna y flora como en otros años", aseguró.
Los datos de superficie quemada en todo el país durante la gestión 2015 se darán a conocer en un plazo de dos meses, pero la ABT anticipó que teniendo en cuenta el incremento de los focos de calor el área quemada será superior a la de 2014 cuando se alcanzaron 2.898.000 hectáreas quemadas.
También aumentará la deforestación, sostuvo, a pesar de que Bolivia se comprometió el pasado mes de septiembre junto a otros 192 países de las Naciones Unidas a poner fin a la deforestación hasta 2020, un reto asumido en los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
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