Santa Cruz / El Deber.- Las quemas que se incrementaron de forma alarmante en los anteriores días y que han empezado a provocar la destrucción de viviendas mantienen movilizadas a las autoridades cruceñas. La Gobernación envió víveres para los primeros damnificados, además de herramientas y más voluntarios para aplacar las llamas, mientras que el municipio de San Matías se declaró en estado de emergencia por los desastres.
De acuerdo con el reciente informe del Sistema de Alerta Contra Incendios Forestales (Satif), Santa Cruz tiene 595 focos de calor en once provincias. Las malas noticias están referidas a que los incendios forestales en Guarayos, San Ignacio de Velasco y Concepción todavía no han sido controlados.
La situación es bastante preocupante y por ello la Gobernación cruceña envió herramientas cortafuego para aplacar las llamas en la reserva forestal Orquídeas del Encanto, donde se encuentra un orquideario natural. Hasta esta zona también se desplegaron más voluntarios de la Fundación SAR, con el fin de reforzar las tareas de las brigadas que operan en el lugar, según informó el director del Manejo de Recursos Naturales de la Gobernación (Dimarena), Ever Menacho.
La Gobernación también desplegó dos camionetas con colchones, víveres y utensilios de cocina para las ocho familias de la comunidad Candelaria, en el municipio de San Ignacio de Velasco, que perdieron todos sus bienes en el incendio del pasado jueves. Asimismo, un médico oculista se trasladó a la zona para atender a los pobladores afectados por conjuntivitis del tipo alérgico como consecuencia del humo.
De igual forma, la Alcaldía de San Ignacio de Velasco llevó una cisterna con agua y voluntarios para apagar el fuego de las áreas cercanas a dicha comunidad.
Los pobladores se mostraron agradecidos, pero piden más colaboración para poder levantar sus viviendas.
“Fueron momentos de infierno porque el fuego devoró una gruta donde estaba la imagen de la Virgen de la Candelaria, una posta de salud, un galpón con ocho máquinas de coser de la parroquia San Francisco, donde las mujeres aprendían corte y confección. Lo más terrible fue ver cómo el fuego consumió las viviendas en cuestión de minutos”, relató Darío Viana, uno de las personas afectadas.
Entre tanto, en Guarayos el subgobernador de dicha provincia, Wálter Rodríguez, se trasladó ayer hasta la comunidad de Cachuela, a 16 kilómetros de Yotaú, a fin de canalizar ayuda para los damnificados del incendio ocurrido el viernes, que consumió una treintena de viviendas, según los primeros reportes.
Por su parte, el Concejo Municipal de San Matías declaró estado de emergencia por la proliferación de los focos de calor. Después de San Ignacio de Velasco, éste es el segundo municipio más afectado por los incendios. Dicha declaratoria faculta al ejecutivo municipal a usar recursos para evitar mayores desastres en la zona. San Ignacio de Velasco alista una resolución similar.
Relacionado con el incendio en Samaipata, que afectó a la zona de Agua Dulce, se conoció que éste ya fue controlado gracias al trabajo de los bomberos forestales y personal de la Alcaldía.
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