La secretaria de Protección de la Madre Tierra de la Gobernación, Soledad Delgadillo, informó que reportaron incendios en Sipe Sipe, Cochabamba, Sacaba y Colomi.
El incendio en las zonas de Chaupisuyo y Viloma Grande, en Sipe Sipe, y el de Larati, en Sacaba, mantuvieron el fuego desde el jueves 6 de agosto sin que se pueda sofocar.
Otros dos incendios iniciaron la jornada pasada, uno en la zona de Laguna Taquiña, en el municipio de Cochabamba, y otro en área de la cordillera, en Colomi.
La unidad de Gestión de Riesgos (UGR) de la Gobernación acudió a tres puntos, excepto al de Cochabamba, donde se hace cargo el Municipio. En los otros puntos también trabajan las municipalidades.
En ninguno de los casos las llamas llegaron a zonas de bosques.
BAMBI BUCKET Ante la emergencia y la dificultad de ingresar a zonas montañosas en Larati, las autoridades decidieron que se utilice un helicóptero y trasladar agua en el Bambi Bucket.
El responsable de la UGR de la Gobernación Óscar Soriano informó que se harán unas tres descargas para evitar que el fuego alcance la vegetación y arboleda, donde hay más riesgo es en Larati.
Para sofocar el fuego trabaja personal de la UGR, Bomberos de la Policía y grupos de voluntarios, además de funcionarios municipales.
La Secretaria de la Madre Tierra de la Gobernación agregó que desde el Ministerio de Defensa les ofrecieron un avión para el traslado de personal, si fuera necesario.
CIFRAS En lo que va del año, en el departamento, los incendios sumaron alrededor de 45. Solo hasta mediados de julio ya habían 38 incendios forestales, que afectaron un total de 338.5 hectáreas.
Soriano estimó que ahora se acercan a las 500 hectáreas consumidas.
No se dio con los responsables en ninguno de los casos.
CAUSAS En todos los casos, los focos de calor fueron provocados, lamentó la autoridad.
Generalmente, los incendios son generados por el chaqueo y el barbecho, prácticas utilizadas en las tierras agrícolas.
“Recurrimos a la conciencia de la población, a los compañeros campesinos y también a alguna gente de la ciudad. Tenemos que ser más responsables”, manifestó Delgadillo.
En el campo se acostumbra encender fuego para limpiar las parcelas y cuando no se controla da lugar a estos daños.
En esta época de estiaje y de chaqueo la tierra está seca y el riesgo de incendios se incrementa.
“Los niveles de contaminación son muy altos. La gente que llega a Cochabamba lo siente en sus ojos. Si bien nosotros estamos adaptados seguimos dañando nuestra salud”, afirmó.
Pidió a los municipios de hacer más vigilancia.
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