Durante los últimos cinco años la cobertura de los servicios básicos de agua potable llegó a 943 mil habitantes en todo el país, mientras 700 mil personas más accedieron al servicio de alcantarillado sanitario, informó la ministra de Medio Ambiente y Agua, María Esther Udaeta.
“En este período se invirtieron 1.108 millones de bolivianos en la construcción, ampliación y rehabilitación de estos servicios básicos, es decir, 273 millones más que la inversión ejecutada entre 2002 y 2005, cuando el monto ascendió a 835 millones de bolivianos”, precisó.
La autoridad señaló que en la gestión del actual Gobierno se ejecutaron 232.143 nuevas conexiones domiciliarias de agua potable, a las que se sumaron 159.824 instalaciones sanitarias domiciliarias, trabajos que abarcaron casi la totalidad de los municipios del país.
Según Udaeta, a través del Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA), el Gobierno del presidente Evo Morales priorizó la ejecución de proyectos en las zonas periurbanas y zonas rurales, donde los niveles de pobreza son alarmantes.
“Llevando agua potable y saneamiento a esas zonas hemos mejorado las condiciones de vida de esa gente, lo cual ha permitido la reducción de las tasas de enfermedades infeccionas intestinales y respiratorias en la población infantil y de adultos mayores”, especificó.
En las zonas rurales y periurbanas se han perforado 191 pozos para la provisión de agua potable, de los cuales 10 son manuales y 181 son profundos, es decir que funcionan con bombas alimentadas por energía eléctrica. Estos proyectos se ejecutaron en coordinación entre el MMAyA y la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA).
Entre los proyectos de emergencia para enfrentar los efectos del cambio climático, el MMAyA ejecutó el proyecto de Ampliación de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Puchukollo, Fase I, con una inversión de 57,2 millones de bolivianos, con recursos provenientes del Tesoro General del Estado (TGE).
La obra concluida fue entregada oficialmente por el presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, el 24 de agosto de 2010.
Luego de la ampliación, la planta tiene una capacidad de tratamiento de 1.200 litros de aguas residuales por segundo.
Por otra parte, el 30 de noviembre de 2010 la ministra Udaeta entregó oficialmente las obras de ampliación de la Planta de Potabilización de Alto Lima, donde se invirtió un monto de 10,8 millones de bolivianos. Al presente, esta infraestructura tiene la capacidad de potabilizar 1.150 litros de agua para el suministro a las ciudades de El Alto y La Paz.
“De esta manera, parcialmente se ha superado el problema de la escasez de agua potable que se genera como efecto del cambio climático”, finalizó Udaeta.
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