Desde una colina como San Sebastián, el cerro de San Pedro o desde el Parque Tunari, es notoria la existencia de una capa densa y oscura que es la contaminación atmosférica a la que está sometida la ciudad de Cochabamba, pero lo peor está en el Sur.
El responsable de la Dirección Especial de Protección de la Madre Tierra de la Alcaldía, Germán Parrilla, explica que según los reportes de las estaciones de la Red de Monitoreo de la Calidad del Aire (Red MoniCA) la más alta contaminación está en la zona Sur de la ciudad, donde incluso se supera fácilmente los niveles registrados en las fiestas de San Juan en 2011 (120 unidades de contaminación) que están dentro del parámetro del Indice de Contaminación Atmosférico (ICA) malo.
Ayer a las 14:30 horas la estación instalada en el parque Kanata del Sur registraba 93,7 puntos de contaminación y la estación Norte en Semapa cero. A las 19:00 horas el nivel en el Sur redujo a 91,3. El martes a las 16:00 horas la estación Sur presentaba 83 unidades de contaminación y la Norte cero, a las 18:00 en el Sur se elevó a 84,4 y al Norte se mantenía sin contaminación.
Parrilla explica que la principal causa de contaminación al Sur son las ladrilleras que aunque tienen gas solo lo usan para encender los hornos y que continúan con leña y otros combustibles. El parque automotor es un segundo causante que afecta al centro y Norte de la ciudad y suma contaminantes en el Sur. Según la autoridad un tercer motivo son los chaqueos que se hacen en el oriente del país e incluso en Brasil y cuyos efectos se concentran en Cochabamba por su orografía.
CALIDAD El índice de contaminación atmosférica para identificar la calidad del aire emplea cinco categorías. La considerada buena es la que presenta entre cero y 50 puntos. “La calidad del aire se considera como satisfactoria y la contaminación del aire tiene poco o nulo riesgo para la salud”, se explica en el portal municipal de la madre tierra.
Es regular cuando el índice se encuentra entre 51 y 100 puntos, la calidad del aire es aceptable. Es mala cuando el índice se encuentra entre 101 y 150, algunos grupos sensibles pueden experimentar efectos en la salud. “Hay algunas personas que pueden presentar efectos a concentraciones menores como es el caso de personas con problemas respiratorios o cardíacos, los niños y ancianos”, se describe.
Y cuando el índice es “muy malo” es cuando se encuentra entre 151 y 200 puntos, toda la población experimenta efectos negativos en la salud y los miembros de grupos sensibles pueden presentar molestias graves.
La última categoría es denominado “extremadamente mala”, cuando el valor del índice es mayor a 201 y la población en general experimenta molestias graves en la salud.
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