La laguna Alalay ubicada al sudeste de la ciudad de Cochabamba mantiene su cantidad de aves acuáticas con una tendencia al incremento, siendo que los tres últimos años alcanzó una abundancia de 1.617 especies, según el informe del biólogo del Centro de Biodiversidad y Genética (CBG) de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), José Balderrama.
A 2.550 metros sobre el nivel del mar, la laguna tiene un área de 214 hectáreas y es un lugar de anidación, reproducción, alimentación y protección de aproximadamente 120 especies diferentes de aves.
Del total de animales el 60 por ciento son residentes y el restante 40 migrantes, las cuales llegan a finales de noviembre y principios de diciembre del norte de Estados Unidos, y Canadá; mientras que el otro grupo de aves que llega del sur del continente es de la Patagonia y viene en febrero y marzo. Durante estos meses la cantidad y variedad de aves aumenta a 200. Por tanto, es vital mantener un equipo de monitoreo en la laguna, especialmente en la época de mayor migración, febrero y julio.
Según explicó Balderrama se reportó que siete especies de aves como la Himantopus mexicanus, Recurvirostra andina y Charadriius collaris, que anidaban en la zona este de la laguna perdieron sus sitios de reproducción habitual por la creación de canchas de fútbol, un campo de golf y otros proyectos.
“Es un desperdicio de espacio, porque muy pocas personas juegan golf (...) sólo por eso, cinco especies de aves ya no vuelven a la laguna Alalay” recalcó el biólogo de la UMSS.
A pesar de ello, el informe del CBG indica que desde el censo de 2011 se registró un gran número de individuos anidando en colonias en los totorales, principalmente de las especies Plegadis ridgwayi, conocido como Yanavico y la Garza garrapatera. “Vengo a correr desde hace años y lo que más me gusta es ver a las aves, son lindas”, “después del colegio, a veces venimos a dar vueltas o sentarnos bajo un árbol, el paisaje es tranquilo” comentaron jóvenes que se encontraban cerca a la laguna, considerada un patrimonio natural intangible de la ciudad de Cochabamba.
Llama la atención que la laguna Alalay registró mayor cantidad de aves en los años 1996 y 1998 con 4.500 individuos, pero sufrió una disminución considerable en 1998, fecha que coinciden con la remodelación de la laguna Alalay. Ello afectó la abundancia de las aves, porque se perturbó el ecosistema debido a que con el dragado se incrementó la profundidad y disminuyeron las zonas con baja profundidad, que eran los espacios preferidos por varias especies para alimentarse.
Al respecto, Balderrama indicó que es importante una campaña permanente de educación ambiental en los estudiantes y la población para generar conciencia ambiental y que comprendan la importancia de este singular ecosistema. Así se preservaría la abundancia y diversidad alada, ya que en el departamento, sólo en la laguna Alalay se registra 35 aves acuáticas.
Por tanto, es necesario un mejor control de la contaminación acústica y ambiental, porque este espejo de agua ayuda a regular la humedad y temperatura en Cochabamba. Pero, sobretodo es el hábitat de varias especies, recalcó el experto en aves.
REGISTRAN MENOS VARIEDAD DE ESPECIES
Las especies perdidas o que se han vuelto raras en la laguna Alalay son los patos Anas clypeata (no observada desde el 2000), Dendrocygna viduatta y la Gaviota larus pipixcan que no se registraron en varios años. Mientras que los Gaviotines sterna hirundo, Sterna superciliaris y Phaetusa simplex están ausentes posiblemente por el incremento de la pesca en los últimos años.
Si embargo, Cochabamba también cuenta con otras lagunas donde abundan las aves acuáticas, por ejemplo en Albarrancho se tiene 42 especies, Angostura 34, Juntutuyu 32, Corani 32, Acero K’ocha 26, Cotapachi 23, Parko K’ocha 22, Pilawito 22, Coña Coña 21, Inundación Albarrancho 19, Wara-Wara 13, Chaki Khocha 13, Kollpa K’ocha 10, Huayñacota 9, Huerta Pampa 8, Tuti Alto 6 y Tuti K’ocha 3.
Ahora vean los que paso con el Lago Poopo, nadie se preocupa por la Naturaleza, pare empezar botan basura al río, después nuestras generaciones sufrirán por agua, y pagarán más por los pocos alimentos que necesitan de agua para desarrollarse, al final se redujo la fauna y flora, x canchas poco usadas!.... y que decir de la imagen global de la Laguna Alalay, si bien todavía la tenemos pero está poco mantenida y deteriorada.
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